La tranquera de la estancia donde vivieron los Guevara Lynch. Quien podía imaginar que allí pasaba sus veranos y sus inviernos Ernesto Guevara, mas conocido como el Che Guevara. Sus contemporáneos lo recuerdan de niño y de joven recorriendo el pueblo, coexistiendo con ellos. Luego la familia dejó el lugar y por largo tiempo estuvo abandonada. Es ahi donde los adultos jóvenes que no lo conocieron toman la posta en el relato, reconstruyendo entre todos la historia. El casco tenia en sus sótanos pasadizos y laberintos que seguramente, ayudaban a escapar al Che en sus persecuciones. Los antes jóvenes, jugaban en esos laberintos cuando el lugar estaba abandonado. Luego la estancia fue vendida y hoy no se puede ingresar a la misma. Queda sellado allí el espacio físico de la historia, que permanece y se perpetúa en el colectivo portelense.
Seguramente, no sabías de esta historia, y es que ningún libro la menciona. Son las voces de los protagonistas y testigos la que nos la trae... felizmente, para rescatarla y llevarla a la luz.
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